El equipo de Antonio Conte queda a ocho puntos del cuadro de Mauricio Pochettino, que marca los puestos que dan acceso a la Liga de Campeones y que aprovechó la dinámica positiva para remontar y lograr los tres puntos en el derbi londinense.
El Chelsea, por su parte, mostró la fragilidad que le acompaña en este tramo del curso. Desperdició una ocasión única para amenazar la posición de su rival y alimentar sus opciones de jugar la próxima temporada en la máxima competición continental.
No supo el conjunto blue aprovechar la renta que obtuvo ventaja a la media hora gracias al español Álvaro Morata, que remató de cabeza un centro por la derecha de Victor Moses.
El empate condicionó el partido. Llegó al borde del descanso, gracias al danés de Christian Eriksen que culminó una acción iniciada por Ben Davies.
La igualada afectó a los locales, que perdieron el rumbo del choque tras el intermedio. Entonces irrumpió Dele Alli, que en cuatro minutos marcó dos goles y sentenció el choque. El primero en el 62, a pase de Eric Dier. Después, en el 66, que cerró el partido.
El Chelsea, que el pasado fin de semana ganó al Crystal Palace, volvió a la senda de la derrota. Acumula tres en los cuatro últimos partidos y se aleja de la cuarta plaza. Además, su quinto puesto es amenazado por el Arsenal, que previamente superó al Stoke.
El Tottenham, por su parte, queda a dos puntos del tercero, el Liverpool, que tiene un partido más. EFE
