El mellizo, que repartió asistencias, más de tres servicios, y convirtió el segundo tanto frente a Universidad de Chile con una exquisita definición a los 59 minutos, no pudo completar el partido por una decisión técnica.
Seis minutos después de hacer el gol y dedicárselo a su hijo Ciro fue sustituido y no pudo ocultar su fastidio y su gesto de reprobación con el técnico Diego Dabove, que lo hace alternar entre titular y suplente.
El cambio se produjo cuando mejor estaba jugando Ángel y en un momento en el que el equipo contaba con más espacios en la ofensiva, ya que los chilenos adelantaron sus líneas en la búsqueda del descuento.
Dabove explicó brevemente el motivo de la modificación, pero Romero no escuchó bien o se quedó disconforme con la aclaración por lo que se dio vuelta hacia donde estaba el entrenador y ya lo encontró de espaldas.
“Obviamente que a uno no le gusta salir, siempre trata de ayudar dentro de la cancha, pero hay que aceptar las decisiones del entrenador”, comentó al respecto en conversaciones con la Televisión.
San Lorenzo se medirá con el Santos brasileño, actual subcampeón de América, en la tercera fase del torneo continental, la última previa a ronda de grupos.