Al término del encuentro que terminó con 6-0 para el equipo local, que se situó como líder de la competición, Guardiola se acercó al lugar donde estaba el cuerpo técnico y los suplentes del conjunto rival. Le tendió la mano Guardiola que vio cómo Sarri se marchó hacia los vestuarios sin atenderle.
Fue Gianfranco Zola, segundo entrenador del Chelsea, el que mantuvo el tipo y conversó con el técnico español, que no entendió la actitud de Sarri.
“Zola me dijo que Sarri no me vio. Lo entiendo. No tengo ningún problema con Sarri”, dijo tras el encuentro Pep Guardiola, que restó trascendencia al comportamiento del técnico italiano.
La goleada encajada en el Etihad es un revés histórico para la entidad londinense. Nunca antes desde que se creó la Premier como tal, el Chelsea había encajado un marcador tan abultado. Solo en una ocasión, cuando contaba con la denominación de Liga de Inglaterra, padeció un 0-7, contra el Nottingham Forest en 1991.