El máximo responsable del fútbol argentino y vicepresidente de la FIFA aseguró esta mañana en diálogo con Radio 10 que finalizará su mandato como presidente de la AFA y que luego “vendrán los más jóvenes y la nueva camada de dirigentes” a reemplazarlo.
Grondona, que dirige la AFA desde 1979, aseguró que pese a “estar cansado” conservará su puesto para sostener el cargo de vicepresidente de la FIFA y explicó que de no hacerlo “se perdería el cupo para representar a Argentina y Latinoamérica a nivel mundial”.
Tras comentar que es “un eterno agradecido a lo que la señora (por la Presidenta Cristina Fernández) ha hecho con el fútbol”, Grondona, que durante la gestión de la Jefe del Ejecutivo logró asociarse al Estado en los derechos de las transmisiones por televisión, aclaró que “el fútbol tiene un contenido importante que es el fixture del campeonato oficial”.
Sobre este tema, sostuvo que está “completamente seguro” que ahora se gasta en publicidad lo mismo que se gastaba antes, pero que antes ese dinero iba a entidades privadas comerciales.
Finalmente, el dirigente indicó que hay mucha gente joven capaz y que los recursos de la AFA de aquí al 2022 “están completamente cubiertos”.
El anuncio del titular de la AFA coincide con la publicación un informe de la revista France Football en el que pretende demostrar que Qatar compró votos para ser elegida sede del Mundial 2022 e involucra en el denominado “Qatargate” a Grondona y otros apellidos ‘ilustres’ del fútbol mundial como Platini, Batistuta, Zidane y Guardiola.
Julio Grondona preside la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) desde el año 1979 y ejerce la Vicepresidencia de la FIFA, donde, además, ocupa la Presidencia de la Comisión de Finanzas y el Consejo de Mercadotecnia y Televisión de la misma entidad.
Durante su gestión al frente de la AFA, la selección argentina obtuvo el campeonato mundial de fútbol México 1986, dos medallas de Oro en los Juego Olímpicos de Atenas 2004 y Pekín 2008 y las copas América de 1991 y 1993.
Antes fundó y presidió el Club Arsenal de Sarandí y luego se convirtió en titular del Club Independiente, desde donde recaló en la AFA en plena dictadura militar.
