Muy molesto, el técnico argentino compareció a la rueda de prensa posterior al encuentro en el estadio Monumental, de Buenos Aires, y dedicó la mayoría de los minutos de su contacto con los periodistas a aludir a una nota publicada hoy por el diario El Mercurio.
Según el periódico chileno, que cita testimonios de una clienta y empleados de un café santiaguino, los internacionales Jorge Valdivia y Jean Beausejour se emborracharon el martes último en ese local, una horas antes de acudir al entrenamiento de la selección.
“Hoy no jugamos solo contra Argentina, sino contra varios medios chilenos que nos han atacado mucho. Han sido muy injustos con nosotros”, se quejó el técnico antes de indicar que la plantilla está “muy golpeada”.
“Desgraciadamente en Chile debe haber hoy mucha gente contenta”, comentó al aludir al supuesto incidente “que no se puede comprobar”, en palabras de Borghi.
“Hay muchos colegas de ustedes que tienen envidia y no sé por qué, si porque pienso, si porque soy diferente, si porque me río o porque contesto”, argumentó.
Afirmó que no puede investigar un hecho sobre el que no hay más pruebas “que lo que a alguien se le ocurre escribir en Twitter” y sostuvo que la confianza en sus futbolistas “está siempre”.
Sobre el partido en Buenos Aires, consideró que “Argentina jugó más al contragolpe que Chile” y opinó que dos goles albicelestes “sobraron”.
“Pero los marcaron. Todos sabemos que los delanteros argentinos hacen daño”, remarcó ‘Bichi’ Borghi.
“Ahora veremos cómo nos rearmamos para el próximo partido. Por suerte no hay lesionados”, completó.
El medio Mauricio Isla aseguró sentirse “dolido” por la abultada derrota, porque, apuntó, “Chile llegaba con la ilusión de hacer historia” en Buenos Aires, donde nunca ha ganado.
“No queríamos venir a especular, sino a jugar ofensivamente. Si hubiésemos especulado, quizás nos habríamos comido ocho (goles). La gente no se fue contenta pero sí tranquila porque salimos a atacar”, afirmó el volante, de lo mejor que mostró la selección chilena. EFE
Foto: La Tercera.
