Tras el pitido del final de un partido que se calentó en el tiempo añadido con varias entradas duras, se produjo en el centro del campo una tangana en la que se vio involucrado Luis Enrique. El técnico español acudió a una zona donde Achraf Hakimi y Gianluigi Donnarumma discutían con Joao Pedro, que cayó al césped tras sentir un golpe.
Luis Enrique impactó contra el brasileño al soltar el brazo izquierdo y golpear primero en el pecho y después en la cara del futbolista. El incidente provocó varios minutos de discusiones entre los dos equipos, antes de que la situación se calmase.
“Tenemos al entrenador más disciplinado y respetado del mundo”, dijo Al-Khelaifi en zona mixta del MetLife Stadium, en un gesto poco habitual de los dirigentes, ya que es un espacio reservado principalmente para los jugadores tras el partido.
Y añadió: “Fue a separar la pelea y se vio envuelto en ella. Los entrenadores también merecen respeto”.
Esta misma versión es la que utilizó el propio Luis Enrique tras el encuentro, alegando que su intención era “separar a los jugadores” y evitar que la trifulca fuera a mayores.
“Al final del partido hay una situación que creo es totalmente evitable, por parte de todos. Mi objetivo y mi intención, como siempre, era intentar separar a los jugadores para que no hubiera más problemas”, afirmó en rueda de prensa el técnico asturiano.