El Milan y el Real Madrid concluyeron sin éxito por motivos fiscales las negociaciones por el fichaje del brasileño Ricardo Izecson dos Santos Leite, Kaká, quien, de momento, no podrá regresar al equipo italiano, del que se marchó en 2009 para fichar por el club español.
“No han llegado a buen puerto las negociaciones por Kaká y, por lo tanto, renunciamos”, dijo el consejero delegado del club italiano, Adriano Galliani, a los periodistas, al margen de la presentación en Milán (norte de Italia) del álbum de futbolistas 2012-2013 de Panini.
El directivo del club lombardo explicó que cerrar esta operación con el Real Madrid no era “practicable” a causa de los distintos tipos de fiscalidad aplicables al fútbol en Italia y España y que hacían que las cuantías se hicieran insostenibles para el Milán.
“Ha habido complicaciones decisivas. Hace una hora ha saltado la negociación. Kaká ha hecho todos los esfuerzos posibles e inimaginables, pero los problemas de fiscalidad han llevado al Real Madrid a parar la negociación”, afirmó Galliani, en declaraciones que recogen los medios italianos.
“Hay que preguntarse si es normal que en un país se pague el 24 por ciento (de impuestos por estas cosas, por España) y en otro el 47-48 por ciento”, en referencia a Italia, agregó el consejero delegado del club milanés, quien aseguró que no fichará ningún otro delantero en este mercado de invierno.
Con estas declaraciones el club “rossonero”, propiedad del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, vuelve a poner fin a un nuevo capítulo en la serie de intentonas que el Milán ha llevado a cabo por recuperar al centrocampista brasileño, quien marchó al Real Madrid por 67 millones de euros.
El diario deportivo “La Gazzetta dello Sport” aseguraba este mismo lunes en su edición digital que el club italiano había alcanzado un acuerdo con el jugador para que éste se redujera el sueldo (de 10 a 6 millones de euros por temporada) para que pudiera así hacerse viable para el Milán su vuelta al equipo.
El rotativo explicaba que el club lombardo estaba a la espera de que el Real Madrid diera el visto bueno a la operación, cuyo nudo principal se situaba en los aspectos fiscales, toda vez que el Milán buscaba una cesión durante 30 meses, el tiempo de contrato que le resta al jugador con el club español de los seis que firmó.
El propio Kaká expresó en los últimos días su deseo de volver al club milanés durante una visita a Milán, donde se reunió con su compatriota Robinho, que actualmente también viste la camiseta “rossonera”.
“Yo ya he dicho que estoy dispuesto a encontrar una solución con el Real, que me vaya bien a mí y a ellos. Que hablen los clubes, yo no estoy aquí para esto. He venido a ver a algunos amigos”, dijo el jugador en la capital lombarda la semana pasada.
El Milán ya intentó recuperar al centrocampista brasileño el pasado verano, llegando a mantener un encuentro con la directiva del Real Madrid en Nueva York aprovechando un amistoso que ambos equipos disputaron en la ciudad estadounidense. EFE