Rubio, de 21 años, iba a vivir su primera gran noche en la NBA aunque al final se quedase con la “frustración” de la derrota que su equipo de los Timberwolves de Minnesota cosechó ante el Heat de Miami por 101-103 después que el escolta Dwyane Wade anotase la canasta del triunfo y sólo 4,6 segundos para el final.
Al margen del resultado, Rubio dio toda una exhibición de buen juego y sobre de espectáculo deportivo que cautivó no sólo a los 19.356 espectadores que volvieron a llenar el Target Center, de Minneapolis, sino a sus propios compañeros y rivales, en los 31 minutos que disputó.
“Teníamos ganas de conseguir la victoria, pero estás son cosas que pasan y debemos aprender de la experiencia”, declaró Rubio, que consiguió su primer doble-doble como profesional al aportar 12 puntos, 12 asistencias, seis rebotes -todos defensivos-, recuperó un balón y lo perdió cinco veces.
El equipo no estuvo fino en ese apartado del juego al tener 25 por tan sólo 15 del Heat, algo que Rubio reconoció que tendrían que comenzar a corregir.
“Nos quedan muchas cosas por mejorar, pero lo más importante es que tenemos confianza en el juego que queremos hacer en el campo y cada vez entendemos mejor lo que nos enseña nuestro entrenador”, comentó Rubio. “Todo es un proceso de aprendizaje en el que cada vez nos sentimos mejor y más seguros”.
Eso y poder físico fue lo que aportó Gasol en su juego con los Grizzlies de Memphis, a los que ayudó a conseguir una clara victoria -la primera de la temporada-, tras vencer por 113-93 a los Rockets de Houston.
Una vez más la pareja formada por Gasol y el ala-pívot Zach Randolph fue una fuerza imparable tanto en el juego ofensivo como defensivo y la aportación del pívot español no dejó ninguna duda de lo decisiva que fue para conseguir la victoria.
Gasol, que en la pretemporada recibió una oferta de los Rockets por 55 millones de dólares y cuatro temporadas, les recordó que no hubiera sido una mala inversión, sino todo lo contrario, un gran acierto como demostró la aportación de 20 puntos, ocho rebotes y cinco tapones.
El mediano de los hermanos Gasol sólo necesito 29 minutos para imponer su presencia bajo los aros y anotar 6 de 8 tiros de campo y 8-9 desde la línea de personal, además de recuperar tres balones y dar una asistencia.
“Tanto en defensa como en ataque podemos todavía mejorar mucho”, destacó Gasol. “Pero dimos ya una mejor imagen de lo que podemos ser, aunque en el anterior partido frente a los Thunder de Oklahoma City ya tuvimos momentos de buen baloncesto”.
El propio entrenador de los Rockets, Kevin McHale, que debuta esta temporada con el equipo, reconoció que con Randolph y Gasol inspirados (17 de 22 tiros de campo combinados) es seguro que se van a tener problemas.
Los mismos que se encontraron los Raptors de Toronto en su visita al American Airlines de Dallas, donde los campeones de liga, los Mavericks se impusieron por 99-86 a los Raptors de Toronto, que tuvieron en Calderón al jugador que siempre intentó mantener al equipo en el partido, pero al final no pudo evitar la derrota.
Calderón siguió de base titular para jugar 33 minutos en los que aportó 11 puntos (4-8, 2-4, 1-1), repartió siete asistencias para ser el líder del equipo en ese apartado, capturó dos rebotes y recuperó dos balones.