Márquez se cayó junto a otros pilotos en una zona mal señalizada de la pista malaya y sufrió un fuerte golpe en el cuello, en el omóplato izquierdo y en el tobillo derecho que le dejó algo aturdido tanto en el momento de producirse el percance, como después en su zona de taller y hospitalidad.
Al no encontrarse en las mejores condiciones posibles para pilotar su Suter, Marc Márquez decidió junto a su director deportivo Emilio Alzamora y el resto del equipo que lo mejor era marcharse al hotel y descansar para ver en qué estado de ánimo y físico se encuentra mañana el piloto de la escudería Catalunya Caixa-Repsol.