El español Ángel Mullera, que soñaba con acercarse a los puestos de finalista (ocho primeros), no pudo aguantar el ritmo keniano a partir del segundo kilómetro y llegó undécimo a la meta con 8:20.93.
En realidad, la mayor incógnita de la final residía en qué tipo de danza elegiría esta vez Kemboi para celebrar su triunfo. Envuelto en la bandera verdinegra y el corte de pelo al estilo mohicano, interpretó unos pasos de danza ante el público que le aclamaba tras imponerse con un tiempo de 8:06.01
Ezekiel Kemboi tuvo que resignarse al segundo puesto en tres Mundiales antes de lograr dos títulos consecutivos. En Moscú, con 31 años, ha logrado emular a su compatriota Moses Kiptanui, que logró tres seguidos entre 1991 y 1995.
Kemboi partía con la mejor marca mundial del año (7:59.03 en París) para enfrentarse al duelo con la estrella emergente, Conseslus Kipruto, trece años más joven, en una prueba que ya ha dado dos tripletes mundiales a Kenia.
Actual campeón mundial júnior, Kipruto estaba invicto en obstáculos este año y había infligido dos derrotas a Kemboi, en Oslo y en Nairobi, pero en el momento cumbre de la temporada ha tenido que inclinarse ante el rey.
Kipruto marcó el ritmo en el primer mil (2:45.94), con Kemboi en tercer lugar. El segundo kilómetro se cubrió en 5:31.95 con los cuatro kenianos en cabeza, ahora encabezados por Paul Kipsiele Koech, y Kemboi sólo apareció a 200 metros, pero con efectos letales.
El francés Mahiedini Mekhissi-Benabbad, campeón de Europa, llegó con los dos primeros kenianos hasta la última ría, pero en la recta se mostró inferior a ellos. Se llevó, al menos, el premio de la medalla de bronce con 8:07.86.