En el clásico de Bosnia se dio una situación muy especial. Los hinchas del Bijela Brijeg no soportaron el gol de su rival, el Neredi, e ingresaron al campo de juego para agredirlos por haber gritado el tanto de su equipo.
Los futbolistas pasaron por un momento de pánico y debieron resguardarse rápidamente en el vestuario, ante la turba que buscaba golpearlos.
Un jugador del Bijela Brijeg también participó del hecho tratando de bajar a su rival con una patada.