Santana, que su última salida al montículo fue el 2 de septiembre del 2010, regresó en plenitud y aunque sólo estuvo cinco entradas mostró su clase en los 84 lanzamientos que realizó y 50 fueron “strikes”, además de abanicar a cinco bateadores rivales para irse sin decisión.
El bullpen de los Mets se encargaron de seguir silenciando a la artillería pesada de los Bravos y el dominicano Ramón Ramírez fue el que le quitó la pelota para lanzar una entrada y un tercio y logró la victoria.
Ramírez (1-0), que fue el primero de los cuatro relevistas que utilizaron los Mets espació dos imparables y dio una base por bolas después de completar 19 lanzamientos y 9 fueron colocados en la zona buena.
Su compatriota en cerrador Frank Francisco se encargó de sacar los tres últimos “outs” del partido con un ponche para su primera salvamento de la temporada.
La única carrera del partido fue anotada por la parte baja del sexto episodio por el jardinero central puertorriqueño Andrés Torres que corrió a la goma con sencillo impulsador del tercera base David Wright contra el abridor Tommy Hanson (0-1), que cargó con la derrota después de lanzar algo más de cinco entradas.
La nota negativa para los Mets fue la lesión de Torres que se le reprodujo la contracción muscular que sufre en la pantorrilla izquierda.
La jornada inaugural en el Citi Field, que estuvo dedicada a homenajear al exreceptor Gary Carter, que falleció hace unos meses, registró una entrada de 42.080 espectadores, la mayor que se ha dado en el inicio de temporada desde el 2009.
El interés de los fanáticos de los seguidores de los Mets se mantiene a pesar que los dueños del equipo han recortado 43,4 millones de dólares de su nómina con relación a la pasada temporada.