Todo el público de pie y aplaudiendo. Una atmósfera invadida por la emoción. Un momento histórico. El equipo femenino de básquetbol terminaba de dar una lección de lucha, esfuerzo y pasión, pese a las limitaciones. Lograron una gran medalla de plata en los Juegos Odesur 2022.
Lo vivido los últimos días en el SND Arena fue mágico, con la gente esperando durante varias horas para ingresar al estadio, los cánticos, la fiesta y ese orgullo que despertó después de mucho tiempo. Tal vez, una sensación similar se vivió en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Eso y mucho más generaron en estos días Paola Ferrari, Marta Peralta, Jazmín Mercado, María Carolina Caravez, Tamara Infrán, Johana Ghiringhelli, Ximena Ibarra, Natalia Quevedo, Manuela Ramírez, Andrea Gómez, Ana Brítez y Astrid Huttemann.
Verle a cada una de ellas pelear hasta el final, lanzarse al suelo para recuperar la pelota, esforzarse al máximo para alcanzar un rebote y alentarse todo el tiempo pese a un fallo o al marcador adverso fue contagiaste. Se hicieron fuertes, se unieron y demostraron eso.
Su valentía y coraje cobra aún mayor valor al saber que hace dos años no se tiene una liga profesional de basquetbol femenino en Paraguay. Un hecho inaudito. Todavía se sigue ninguneando el desarrollo deportivo para las mujeres.
La mayoría de las jugadoras vienen jugando juntas de manera silenciosa desde hace mucho tiempo, sin mucho apoyo, pero el panorama empeoró después de la pandemia del Covid-19. Solo se reactivó el básquetbol masculino.
Hoy muchas de ellas son madres y superan los 30 años. A lo largo de la semana incluso se las vio amamantando a su hijos. La pasión y el amor que sienten por el básquetbol y por representar al país hicieron que redoblaran sus esfuerzos.
Trabajo, entrenamiento y madres
María Carolina Caravez, ni bien terminó el partido frente a Colombia, resaltó el esfuerzo que debieron hacer todo este año para lograr ser competitivas en los Juegos Odesur 2022, sin tener una liga local.
“Todas trabajamos, al mediodía entrenábamos, luego volvíamos al trabajo y por la noche debíamos cumplir nuestro rol de madres o hacer otras actividades pendientes. Nos ingeniábamos para entrenar”, afirmó.
Habitualmente solo se ven los resultados y no el inmenso sacrificio que hay detrás. Ahora es momento de valorar todo el esfuerzo y el trabajo que realizaron. Las chicas se lo merecen. El deporte femenino lo requiere.
La voz de la experiencia y liderazgo
Paola Ferrari es la líder indiscutible de este equipo y con su jerarquía muchas veces se puso el equipo al hombre. Empezó a jugar a los 15 años y brilló en las mejores ligas de Europa. A sus 37 años, saborea por primera vez el reconocimiento multitudinario de la gente.
Para representar al país en estos Juegos Odesur renunció a jugar nuevamente en el Viejo Continente y para seguir con ritmo de competencia jugó el campeonato uruguayo. “Si me iba a Europa no me iban a dejar venir”, indicó a radio Monumental 1080 AM.
Su liderazgo no solo se reflejó en sus decisiones. También hace hincapié en la problemática de la falta de apoyo para una ligar local femenina. En ese sentido, lamentó que los clubes no tengan interés en incentivar y fomentar el deporte profesional femenino.
“Los clubes deben armar equipos, buscar auspicios, trabajar en las inferiores. Eso se perdió. Es un cúmulo de cosas. Los clubes dejaron de creer que tenían que participar en campeonatos femeninos. Eso debe cambiar. Hay que tener una liga”, afirmó.
Anhela que sus compañeras de equipo también tengan la posibilidad de poder vivir del básquetbol y no estar trabajando en otros rubros para poder seguir compitiendo en el deporte que las apasiona.
Como ejemplo dio la liga uruguaya por su organización y competencia. “Es para admirar, tienen una liga de 10 meses, hay 12 equipos y cada uno tiene puede tener a dos extranjeras. Nosotros en el país apenas tenemos 3 equipos”, indicó.
Sobre el triunfo que lograron ante Uruguay en los Juegos Odesur, mencionó que lo hicieron por la experiencia que tienen, ya que las jugadoras uruguayas están pasando recién los 20 años y con un futuro prometedor.
Con respecto a las colombianas, Paola Ferrari señaló que muchas de las jugadoras están en ligas europeas o en los Estados Unidos. Por eso recalcó que el logro de la medalla de plata fue fruto de la garra y del compromiso.
Paraguay hizo lo propio el básquetbol 3x3 en estos Juegos Odesur. A pesar de ser una modalidad nueva y casi no practicada en el país, las jugadoras, todas ellas del básquetbol tradicional, tuvieron una destacada actuación y lograron la medalla de plata.
Campeonas de Sudamérica
En junio pasado, el club Félix Pérez Cardozo ganó de forma histórica y de manera invita la Final Four de la Liga Sudamericana del basquetbol femenino, con un soberbio triunfo por 69 - 51 sobre el anfitrión Defensor Sporting de Uruguay.
Y para lograr ese hito debieron jugar partidos amistosos en Argentina.
“Los Juegos Odesur dejarán muchas enseñanzas”, concluyó Paola Ferrari, quien augura que el deporte en general tenga mayor apoyo en el país los próximo años, un deseo expresado por todos los atletas de Paraguay.
