Tras varias semanas de cuidados intensivos y de dura lucha, el ex deportista falleció a causa del a los 82 años de edad.
Da Ponte fue el encargado de ondear la bandera tricolor por primera vez en unos , en la XV edición en México DF, acompañado de su padre como entrenador.
Rodolfo además asistió a la cita ecuménica de 1992, esta vez como entrenador de su hijo Enzo (esgrimista), marcando toda una tradición de la familia Da Ponte en este deporte.