En 2021, Ancelotti fue el elegido por el club que preside Florentino Pérez para ocupar el lugar de un Zinedine Zidane que decidió, por segunda vez, dejar su cargo antes de lo previsto.
Una vuelta inesperada, tras su primera etapa de 2013 a 2015, para un técnico que salió de forma abrupta del Nápoles y transitaba en un Everton de media tabla en la Premier League. Por ello, Ancelotti catalogó su retorno como “una luna de miel” que esperaba que durase mucho tiempo, tanto como para retirarse en el Real Madrid.
“Esta etapa en el Madrid pone fin a mi carrera. Después, lo dejo. El Madrid es la cima del fútbol, tiene sentido poner fin aquí a esta experiencia”, señaló en una entrevista con ‘Il Messaggero’ publicada en agosto de 2022.
Las muestras de amor al club, y viceversa, eran constantes. Fruto de una decisión de volver a contar con el italiano que acabó siendo la más acertada, para ambas partes.
Ancelotti volvió al Real Madrid en 2021 y, desde entonces, lo ha ganado todo: la Liga de Campeones, la Liga, la Copa, la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes.
La duda de completar el círculo dirigiendo a Brasil
Al acabar la pasada temporada, desde las oficinas del Real Madrid trataban la renovación de Ancelotti con cautela, expectantes de lo que deparase el inicio de la presente campaña para ver la dirección que tomaba el equipo. Pero por el camino apareció un factor inesperado: Brasil.
Desde la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) insistieron en que ‘Carletto’ tomara los mandos de su selección al vencer su anterior contrato con el Real Madrid el próximo 30 de junio.
Opción que Ancelotti no negó al ser cuestionado por ello, alimentando los rumores que le situaban en la ‘canarinha’ mientras dirigentes y jugadores le abrían las puertas en sus declaraciones.
Una aventura a los mandos de una selección que es lo que le falta en su extensa y exitosa carrera como técnico, siempre a los mandos de clubes que le ha llevado a ser el único entrenador que ha ganado cuatro Ligas de Campeones y el primero en vencer en las cinco grandes Ligas (Italia, Inglaterra, Francia, Alemania y España).
Sin embargo, ya en una rueda de prensa a finales de noviembre, dejo un mensaje: esperaría al Real Madrid hasta el último día -30 de junio- antes de tomar una decisión sobre su futuro. Y, finalmente, no ha tenido que esperar tanto.
La renovación, premio a saber adaptarse
La renovación hasta 2026 le llega a un Ancelotti inmerso en un gran momento que, además, le define como entrenador, sabiendo sobreponerse con maestría a las dificultades que se ha encontrado y nunca alzando la voz ante las decisiones del club, no todas compartidas.
El francés Karim Benzema se marchó en verano rumbo a Arabia Saudí y no se fichó a un ‘9’ top mundial para ocupar su lugar, como deseaba ‘Carletto’. No se movió ficha por la grave lesión de rodilla de Éder Militao en el primer partido de la temporada. Y Ancelotti se adaptó y exprimió todos los recursos a su disposición.
Fiel muestra de ello es la explosión definitiva del inglés Jude Bellingham, para el que recuperó una posición en el campo que no tenía previamente en sus esquemas, la del ‘10’, consciente de que tenía en sus manos un jugador diferencial. ¿El resultado? 17 goles y 5 asistencias en 21 partidos.
El ‘todocampista’ se ha erigido como la gran estrella del Real Madrid, con permiso de los brasileños Vinícius Junior -lesionado- y Rodrygo Goes -quien arrancó la temporada con más de 30 disparos sin marcar tras su gol en la primera jornada y que ahora sí está rindiendo a gran nivel- en sus primeros meses en el club.
Además, si desde las oficinas del Real Madrid esperaban a analizar el rendimiento deportivo para ofrecerle la renovación a Ancelotti, los números son claros: 24 partidos, 20 victorias, tres empates, una derrota, 55 goles anotados, 18 tantos concedidos y 11 porterías a cero.
Una primera parte de temporada que tiene más mérito aún si se tiene en cuenta la plaga de lesiones que ha sufrido el Real Madrid; especialmente perdiendo a tres piezas clave -Thibaut Courtois, Eder Militao y David Alaba- por sendas roturas del ligamento cruzado anterior de la rodilla.
Además, otras 19 ausencias durante los primeros meses de competición han marcado el paso del conjunto blanco.
Por ejemplo, Vinícius Junior solo ha podido disputar 13 encuentros en lo que va de temporada; Eduardo Camavinga sufrió una rotura del ligamento lateral externo de la rodilla derecha; Aurelien Tchoauméni estuvo 47 días de baja por una fractura en un dedo del pie; Arda Güler aún no ha debutado con el Real Madrid…
Con todo ello, Ancelotti ha guiado al Real Madrid a una gran primera mitad de temporada, siendo líder de LaLiga EA Sports -por la diferencia de goles con el Girona- y clasificando a su equipo como primero de grupo para unos octavos de final de la Liga de Campeones en los que se enfrentará al RB Leipzig.
Y atada su renovación hasta 2026, ‘Carletto’ volverá de las vacaciones navideñas pendiente de si se acude o no al mercado de enero para fichar a un central al tener solo a dos jugadores disponibles de la primera plantilla -Antonio Rüdiger y Nacho Fernández-, y con el primer título de 2024 en el horizonte, la Supercopa de España que se disputa en Arabia Saudí del 10 al 14 de enero. EFE
