Vestido del personaje de ficción Borat, de la película del mismo nombre, un joven checo se metió al campo de juego en el partido entre el Viktoria Plzen y el MFK Karviná y protagonizó una de las imágenes más curiosas del fútbol europeo en la semana.
Corría el minuto 70 cuando el juego se tuvo que interrumpir a causa de tal suceso, que fue detenido por uno de los miembros de seguridad, quien no encontró mejor manera de manejar la situación que con una entrada durísima.