Fue precisamente ante el mismo rival, en el partido de ida, cuando Villa partió por última vez en el once inicial azulgrana. Apenas una hora de juego en los últimos seis encuentros ligueros, abandonado a ser la última opción de Tito Vilanova para la línea de ataque. Villa sabía que ésta debía ser su noche.
No parecía el partido más indicado. Con la eliminatoria prácticamente decidida con el 2-0 del primer choque, del Nuevo Arcángel se pasó a un Camp Nou sin ángel. Noche fría, poca asistencia al estadio y abundancia de no habituales. La ausencia de Messi, Xavi o Iniesta auguraba un choque sin demasiados alicientes. Fue justo todo lo contrario.
Sin sus mejores artistas, el Barça dio rienda suelta a su versión más sinfónica, su espíritu más coral. La imaginación se engendra a veces desde la precisión matemática y el primer tiempo, en este sentido, fue una clase magistral de geometría aplicada, con triangulaciones de manual y combinaciones a velocidad de crucero.
Alexis pudo abrir el marcador en el primer minuto, pero no acertó ante Saizar. Aunque acabaría participando en la goleada, parece que la suerte le haya abandonado. Unas veces un resbalón, otras un mal apoyo. La afición le espera.
El Córdoba se encerró atrás, pues poco más podía ofrecer. Un Thiago superlativo, flanqueado por el mejor Song de la temporada y un Sergi Roberto incisivo, balancearon el cuero de lado a lado sin suspiro, en una sesión de hipnotismo a toda velocidad.
El mareo surtió efecto al cuarto de hora cuando Saizar, en un tremendo error, regaló un balón en un saque con la mano. Song recogió el cuero y lo cedió rápidamente a Thiago, quien tras un control mágico, aprovechó la grieta en la defensa y batió al meta con un disparo raso para estrenarse este curso (1-0).
Poco después, de nuevo Alexis volvía a perdonar, con una vaselina desacertada. El delantero se desesperaba, consciente de que la lucha por la titularidad se disputa en los goles. Los de Villa estaban a punto de caer por partida doble. Los suyos se harían aún esperar.
El primero del ‘Guaje’ fue una obra de arte. En la siguiente jugada, recibió en el área, se zafó de su marcador con una hábil “croqueta” y, desde un ángulo imposible, picó la pelota al palo corto, en el único resquicio.
El espíritu del Laudrup más imaginativo pareció poseer a los azulgranas, que empezaban a recrearse. Alexis envió un pase mirando al graderío, que acabó de nuevo en Villa, para poner el 3-0 en el marcador con un disparo que besó antes la base del mismo poste que poco después rechazaba un precioso remate parabólico de Thiago.
El segundo tiempo devolvió a Alexis de sus tormentos propios. Y eso que, tras la reanudación, volvió a desperdiciar otra ocasión, incluso cuando había superado al portero. Pero sin la confianza para el regate, Alexis no pierde la entrega que le caracterizan.
Un córner y un rebote le bastaron para su objetivo. A los diez minutos saltó más que nunca para cabecear un saque de esquina al fondo de la red y, cuando el partido ya perecía, aprovechó una carambola, tras un remate de Tello, para cerrar la goleada.
El Córdoba mejoró y pudo apuntarse el gol del honor en botas de Joselu y Pedro, que Pinto resolvió sin problemas. Cuatro décadas llevaban los califas sin pisar el Camp Nou y se acabaron llevándose una manita.
-Ficha técnica:
5 - Barcelona: Pinto; Alves (Bartra, m.46), Mascherano, Puyol, Montoya; Song, Thiago, Sergi Roberto (Dos Santos, m.52); Alexis, Cesc (Tello, m.46) y Villa.
0 - Córdoba: Saizar; Fernández, Armando, Alberto Aguilar, Fuentes; López Silva, Caballero (Rennella, m.69), López Garai, Dubarbier (Pedro, m.60); Joselu y Vico (Abel, m.46).
Goles: 1-0, min. 17: Thiago; 2-0, min. 21: Villa; 3-0, min. 26: Villa; 4-0, min. 55: Alexis; 5-0, min. 84: Alexis.
Árbitro: Alejandro José Hernández Hernández (comité Las Palmas). Amonestó a los azulgranas Mascherano (m.62) y Montoya (m.67)
Incidencias: Partido de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, disputado en el Camp Nou ante 37.607 espectadores. EFE