Florencia Carrizosa (24 años) es una chica que deambula entre el ballet y el fútbol, pero un día decidió que lo suyo era el deporte de mucha resistencia. Su talento la hizo clasificar al Campeonato Mundial Ironman 70.3 que se hará en Canadá en el 2014.
Conoció el triatlón tan solo hace dos años. Nunca antes se había subido a una bicicleta de competición y mucho menos tirarse a nadar en aguas abiertas, pero su vínculo empezó con la Media Maratón Internacional de Asunción.
En esos 21 km del 2011 supo que su mente y su cuerpo pedían más distancia. Conoció a su entrenador, Claudio Delpueche (también triatleta) y empezó el romance con este deporte que combina natación, ciclismo y corrida.
Resistencia al extremo. El Ironman es la prueba más dura del triatlón. La distancia oficial es: Natación (3.860 m), Ciclismo (180.000 m) y Corrida (42,195 m), pero ella irá al mundial en el Medio Iron, la mitad de la distancia en las tres pruebas.
EN BRASILIA. Florencia logró su clasificación al mundial del Medio Iron (70.3) que se celebrará en Canadá el año próximo, gracias a su excelente registro en la competencia de Brasilia, al nadar 1.900 metros, 90 km en ciclismo y 21 km de corrida pedestre. Esta odisea lo realizó en 5 horas 29’.
Florencia, estudiante de arquitectura en la Universidad Católica, combina trabajo, estudio y deporte al mismo tiempo. “Esto cambió mi vida, si pudiera dedicarme solo al deporte, lo haría”, dice con convicción la atleta.
Este deporte lleva al extremo la resistencia, ya que una prueba promedio para las damas llega a las cinco horas.
Fuente: Última Hora.