El entrenador barcelonista está convencido de que el fútbol que practica su equipo no es peor que el del año pasado como para estar tan alejado de la primera posición.
“No hemos hecho las cosas tan mal como para estar a diez puntos, pero el rival también está muy fuerte. No hemos estado a un nivel tan diferente respecto al año pasado. Al final, la Liga es una competición en la que pasan muchas cosas. El año pasado superamos récords y este año hemos perdido muchos puntos”, ha argumentado.
El preparador barcelonista, cuya resolución contractual sigue pendiente de su decisión, ya que aún no ha comunicado al club si seguirá la temporada que viene o no, ha sido contundente con la primera pregunta que se le ha planteado en esta dirección: "¡Basta ya. Basta ya! Cuando haya novedades, ya las sabréis”.
Cuestionado por segunda vez en este sentido, Guardiola ha catalogado el asunto como “cansino”.
Guardiola espera para el encuentro de mañana contra el Atlético de Madrid un rival muy marcado por la idea que ha planteado el nuevo entrenador, Diego Simeone. “Es difícil cambiar de dinámicas y él lo ha conseguido. Se nota el sello del entrenador”, ha precisado.
El técnico barcelonista ha defendido al grupo de jóvenes que ha utilizado en los últimos encuentros para cubrir las bajas por lesiones. A ellos ha dado un espaldarazo y los ha liberado de ser el problema de haber perdido siete puntos en dos meses.
“En los últimos partidos, los jóvenes han sido los mejores. Todos ellos (Montoya, Tello, Cuenta y Dos Santos) han estado a gran altura. Los jóvenes han respondido bien a la exigencia de jugar en el Barcelona”, ha argumentado.
Guardiola no considera que el triunfo en Leverkusen haya sido un punto de inflexión del Barça en los últimos partidos, al insistir en que el fútbol que ha jugado su equipo en los últimos meses no ha desmerecido en nada los mejores momentos de su equipo.
Sin embargo, ha reconocido que a sus jugadores a veces, y ha puesto como ejemplo el partido en el Reyno de Navarra, “les faltó algo de ambición”.
“Quizá nos haya faltado ese pelín de ambición, como por ejemplo contra el Osasuna -contra el que el Barça sumó la segunda derrota de la temporada-. Pero no ha sido un año con altibajos en el juego. No hemos estado tan mal. No ha habido partidos en los que hayamos estado muy lejos de nuestro mejor momento”, ha razonado.
Ha animado a sus jugadores a “no bajar los brazos” y a seguir compitiendo al máximo en todos los torneos para vivir “tres meses con alegría y con la conciencia tranquila, por lo que hemos hecho durante todo el año y saber que somos capaces de jugar a gran nivel”. EFE