El técnico del Athletic Club, Marcelo Bielsa, rehusó este viernes aceptar la condición de maestro de Pep Guardiola y, en todo caso, hizo hincapié en los logros del entrenador catalán para transformar el fútbol de los últimos años, cosa que le convierte a él en alumno del entrenador azulgrana.
“Eso de maestro o alumno está justificado por las obras. Mire la obra de Guardiola y la mía y mire quién es alumno y quién maestro. No, yo no soy el maestro, porque las cosas que yo he construido en el fútbol no justifican esa condición, muchísimo menos si las comparas con las que construyó Guardiola”, explicó Bielsa.
En una rueda de prensa en el Miniestadi del FC Barcelona, donde su equipo se ejercitó antes del partido de este sábado ante el conjunto azulgrana, la figura de Guardiola planeó constantemente, especialmente tras los elogios que el técnico culé siempre dirigió hacia el argentino.
“Me parece que es un entrenador que ha construido un equipo que estableció diferencias con el fútbol que se venía jugando en los últimos 25 años. Y no solo diferencias, sino diferencias a mejor”, añadió el “Loco”.
“Eso -ha agregado- lo posiciona de manera proporcional a la gesta de construir un equipo con un fútbol mejor y diferente, ejecutado por los futbolistas que eligió e imaginado por su impronta”.
Aunque recordó que su relación con Pep es mínima, reducida solo a un encuentro que mantuvieron hace años, Bielsa rememoró con humor aquella reunión de casi once horas. “Logré aburrirlo en la hora once, pero me parece que desde el comienzo estaba así y no se animó a irse”, bromeó.
“Es la única vez en la vida que lo vi. ¿Lo admiré? Por supuesto. Un jugador emblemático, integrante de un equipo inolvidable y construyó el equipo que construyó. Pero que yo me atribuya una relación, que ojalá la hubiera tenido, porque es una persona muy valiosa y que enriquecería la relación con cualquier ser humano”, subrayó.
En todo caso, quiso insistir en la importancia de hablar del encuentro de este sábado, respecto al que subrayó que jugar ante el Barça “siempre es maravilloso para cualquier rival”. “Ojalá podamos estar a la altura en lo que a nosotros nos toca”, añadió.
“Es un sueño, una ilusión. A nadie puede inhibirlo (el Camp Nou), es un desafío difícil. Nunca dirigí ahí", explicó Bielsa, quien recordó el partido de la primera vuelta, que acabó en empate.
Sobre aquel encuentro, señaló que a su equipo “le costó muchísimo lograr que fuera parejo y haber llegado al final habiendo protagonizado un partido igualado”.
“A ese equipo le empatamos y pudimos haberle ganado. Recuerdo aquella actuación como una expresión muy importante del Athletic. Uno aspira a que los jugadores que conduce jueguen cerca de su potencial y ese día sucedió eso”, aseveró.
Asimismo, afirmó que no espera que “ninguno de los dos equipos vaya a cambiar su identidad en ninguno de los dos partidos”, en referencia al encuentro de este sábado y la final de Copa que jugarán ambos conjuntos en mayo.
Sobre el cansancio que su equipo pueda acumular por el partido de la Liga Europa disputado el jueves, el argentino señaló que “nunca se justificarían” en ese motivo, pero que lo que más admira de Barça y Real Madrid es “la familiaridad para competir dos veces por semana con una oposición insuperable”.
“Difícilmente juegan contra equipos que no le opongan su máximo potencial. El Athletic tiene todavía que recorrer fases de desarrollo para adquirir esa facultad”, añadió, negando que su equipo vaya a ser “juez de esta Liga” entre Barça y Real Madrid. EFE