El 24 de julio de 2018, el presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol, , había para el proyecto que apunta a las Eliminatorias Sudamericanas para Qatar 2022.
En aquella conferencia, Harrison se mostraba confiado, ya que las negociaciones estaban avanzadas y hasta se animó a decir que el DT estaría presente para el amistoso fecha FIFA que debía disputarse entre este 3 y 11 del corriente mes.
Sin embargo, en el camino ocurrió un pequeño hecho que dinamitó los planes de la cúpula de la APF y que pasó frente a nuestros propios ojos sin que nadie se percate o le dé la importancia que se merecía.
Tras el Mundial de Rusia 2018, mientras todos mirábamos a Ricardo Gareca, Néstor Pékerman, Juan Carlos Osorio y otros, el principal y único candidato real: “Mundialista, conocedor del fútbol paraguayo, que se adapte a las necesidades de la Selección” estaba en Lisboa, Portugal.
Dos días después de las declaraciones de Robert Harrison, como adiestrador, en reemplazo de Roger Machado.
Luego el mismo entrenador brasileño, en oportunidad de la visita al país para el juego de octavos de final de la Copa Libertadores, gracias a la intermediación de Francisco Arce, pero que pesó “el amor” y eso le hizo rechazar la oferta.
“Fueron cerca de 20 días de conversaciones con Robert (Harrison), antes que aparezca Palmeiras; habíamos quedado en tener una última reunión definitiva. Todo estaba muy bien encaminado; a mí me agradó la idea de dirigir a Paraguay”, había dicho el DT post partido con el Ciclón.
Lo de Scolari, la principal opción, había caído y la dirigencia comenzó a mirar con cierto apuro a nuevos caminos que al final llegaron hasta Juan Carlos Osorio. Habrá que ver si se confirma o Colombia también termina por meterse en los planes de la dirigencia.
Lo cierto es que la situación no es la mejor para la Albirroja y el tiempo sigue corriendo. Al analizar este panorama solo siendo optimista tendríamos técnico en este mes.