En Moscú, el Villarreal sufrió muchísimo para arrancar un empate. Lo consiguió en el último suspiro, con un penalti transformado por Santi Cazorla cuando todo parecía perdido.
Antes, el Spartak empató dos veces los tantos del camerunés Ekambi y de Pablo Fornals con un doblete del caboverdiano Ze Luis.
Después, se adelantó por medio del paraguayo y al final se quedó sin dos puntos gracias al acierto de Cazorla, que volvió a marcar con el Villarreal 8 años después (no lo hacía desde el 17 de marzo de 2011).
En el otro partido del grupo G, el que enfrentó al Glasgow Rangers de Steven Gerrard y al Rapid Viena, los primeros se llevaron los puntos (3-1) para acabar en la segunda jornada en la primera plaza. El colombiano Alfredo Morelos, con un doblete, brilló con luz propia para dar una alegría a su afición.
Hubo otros dos pinchazos de equipos ilustres. Todos, en el grupo H. El Marsella no pudo ganar en su visita al Apollon Chipriota. Empató 2-2 pese a los goles de Gustavo Payet y Luiz Gustavo. El serbio Sasa Markovic, a quince minutos para el final, dio la sorpresa.
Y, en el otro encuentro, el Lazio, que sufrió las expulsiones del serbio Dusan Basta y del argentino Joaquín Correa, fue goleado con un doblete de Danny da Costa por el Eintracht (4-1), líder por delante de los italianos con dos victorias.
También hubo un revolcón en Noruega, donde el Sarspborg ganó con claridad (3-1) al Genk belga para estrechar el grupo I. Todos los equipos, tras la derrota por 2-0 del Besiktas de Guti (segundo entrenador) frente al Malmo, tienen tres puntos.