En un colmado estadio José Amalfitani de Vélez Sarsfield, en Buenos Aires, y bajo una intensa lluvia, el local Sergio Maravilla Martínez retuvo la corona del mundo de peso medio de la CMB (Consejo Mundial de Boxeo) al derrotar por puntos al británico Martin Murray por fallo unánime de los tres jueces: 115 a 112.
El argentino arrancó con todo, bajo el intenso aliento de su gente, marcando el ritmo de la lucha con golpes que no generaban mucho daño al rival. Con el correr de los rounds el británico fue creciendo y emparejó las acciones en el octavo asalto, cuando conectó un derechazo en el rostro de Maravilla, que fue al suelo.
CON LO JUSTO. Murray, que tenía controladas las acciones del combate, no se animó a buscar el KO, por lo que permitió a Martínez apostar todas sus fichas en los últimos dos asaltos. En el 11.º y 12.º round, el argentino salió a dar pelea y sumó los puntos necesarios para retener la corona, la misma que conquistó en setiembre pasado ante el mexicano Julio César Chávez Jr.