Mauro Caballero volvió a hacerse con el mando del plantel Decano para la temporada 2017. En su primer partido como DT, tras la vuelta, su equipo consiguió un vibrante empate 3-3 en el Defensores del Chaco.
“Ha sido un partido de mucha dinámica, de ida y vuelta, ellos tuvieron sus chances, nosotros replicábamos. Nos vamos tranquilo por el esfuerzo de todos los jugadores, han dejado todo, se han puesto la camiseta e hicieron un gran esfuerzo pese al poco tiempo de recuperación y del poco tiempo de trabajo nuestro”, dijo el estratega en la apertura de la conferencia de prensa.
En su trayectoria como estratega, Caballero nunca consiguió estrenarse con una victoria. Esta vez estuvo cerca, pero sobre los 92' Nery Bareiro apagó el inminente festejo, con 10 hombres, del Decano.
Al respecto, el estratega expresó: “Ha sido una situación que le puede suceder a cualquiera, jugar con 10 es díficil ante cualquier buen equipo, pero se vio el compañerismo y la conjunción que hay en el plantel”.
Contento, no. “Yo siempre quiero ganar, enfrentamos a un buen rival. La gente habrá salido contenta, por de pronto tendremos una semana más larga para trabajar, hay cosas que corregir y tenemos que darle nuestra idea y nuestro toque”, agregó Caballero, quien aclaró que no se va contento a casa.
Rodrigo Burgos y Fernando Fernández. Ambos futbolistas, recientes incorporaciones franjeadas, sumaron sus primeros minutos de competencia. “Yo los vi muy bien a los dos. Rodrigo entró en un momento en donde necesitábamos mayor contención. Brian estaba cansado y queríamos darle un poco más de frescura al ataque con Fernando, pero está claro que ellos pueden dar más”, señaló Mauro.
Presión alta. “La idea que tenemos es salir a buscar los partidos, si uno espera es un equipo conservador, pero hay veces que tenemos que proponer. La idea es dar presión alta entre los primeros 10 y 15 minutos en los dos tiempos y después dosificar”, confesó el adiestrador.
“Nos hicieron tres goles. El Olimpia tiene que tener el arco en cero. Nos faltó un poco más de coordinación pero eso también porque falta más trabajo”, añadió.
“Estuvimos imprecisos, perdíamos balones fáciles, Guaraní es un equipo con una transición muy rápida. Esperemos que en los próximos partidos no volvamos a cometer tantos errores”, finalizó con una buena dosis de auto crítica, dando desde el discurso muestras de cambios en la institución.