El suizo Roger Federer afirmó tras clasificarse para disputar su séptima semifinal de Wimbledon, en la que se enfrentará al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, que a partir de la penúltima ronda de los torneos acostumbra a desplegar su “mejor tenis”.
“Es agradable volver a donde he estado tantas otras veces. Normalmente, a partir de semifinales suelo jugar mi mejor tenis. Obviamente, Novak (Djokovic) es el vigente campeón y el número uno, así que no va a ser fácil superarle”, señaló el suizo, tercer cabeza de serie en un torneo que ha ganado en seis ocasiones.
El helvético superó hoy un choque de cuartos que pareció ser un mero trámite para él, frente al ruso Mikhail Youzhny, vigésimo sexto favorito, que no aguantó más de una hora y 32 minutos (6-1, 6-2 y 6-2) ante la raqueta de un Federer aparentemente recuperado de las molestias en la espalda que lastraron su juego en los últimos partidos.
“Me siento feliz por cómo fueron las cosas en la pista. Pude centrarme en el tenis, en la táctica, en lugar de tener que preocuparme por los problemas que sufrí el otro día, menores o mayores, como vosotros queráis”, apuntó Federer en una rueda de prensa.
El suizo, que a sus 30 años acumula 16 títulos de Grand Slam, se ha mostrado convencido desde el inicio del campeonato de que puede reeditar un título que ganó por última vez en 2009, y en el que ha caído en los cuartos de final en las dos últimas ediciones.
Este año, la semifinal frente a Djokovic es una “final anticipada”, ante la ausencia contra pronóstico en la parte baja del cuadro del hasta ahora número dos, el español Rafael Nadal, que cayó en segunda ronda ante el número cien del ránking, el checo Lukas Rosol.
“La semifinal es un gran reto, no lo niego”, señaló Federer, que ha ganado en 14 de las 26 ocasiones en las que se ha enfrentado a Djokovic, un duelo ya clásico en el circuito que nunca se ha producido sobre hierba.
“A estas alturas ya no es un cambio drástico jugar sobre arcilla, pista dura, bajo techo o sobre hierba, pero no deja de ser interesante que este sea nuestro primer duelo en esta superficie”, apuntó Federer, que ha perdido en sus tres últimos encuentros con el serbio, el último de ellos en las semifinales de Roland Garros, en tres sets.
El suizo recalcó que el número uno del mundo “es muy bueno y muy peligroso desde la primera vez” que se enfrentó a él, en 2006 en Mónaco, cuando el suizo se impuso a un Djokovic de 19 años que cayó por 6-3, 2-6 y 6-3. EFE
