Paraguay es octava con 18 puntos y dentro de quince días se medirá en Santiago con Chile, cuarta clasificada con 23, los mismos de Uruguay, que visitará a la Albirroja en la siguiente fecha, el 5 de septiembre.
Estos dos compromisos, de los que solo sirve ganar, servirán para saber si Paraguay mantendrá las opciones matemáticas de alcanzar una de las tres plazas directas que permanecen en juego tras la clasificación anticipada de Brasil, o tiene la posibilidad de pelear por el quinto puesto, con lo que obtendría el derecho a jugar una repesca.
La selección entrenada por Francisco ‘Chiqui’ Arce ha perdido los últimos cuatro partidos que jugó, uno ante Brasil por eliminatorias sudamericanas y sendos amistosos con Francia (5-0), Perú (1-0) y México (2-1).
Ante Brasil cayó por 3-0 a finales de marzo. La Canarinha obtuvo así su plaza en Rusia a falta de cuatro fechas.
En la primera ronda de las eliminatorias, la Albirroja ganó en Santiago a Chile por 2-1 en Asunción en septiembre pasado. Pero en su visita a Montevideo cayó por 4-0 ante Uruguay.
Chile vuelve a las eliminatorias con el antecedente de haber disputado en junio la final de la Copa Confederaciones, que ganó Alemania por 1-0.
Uruguay se citará con Paraguay tras enfrentarse con Argentina.
Paraguay volverá a volcar sus esperanzas en las botas de su mayor figura, Óscar Romero del Alavés español, y la calidad del centrocampista Miguel Almirón, que destaca en la MLS.
El conjunto guaraní no ha vuelto a ser capaz de encontrar el nivel futbolístico que lo llevó hasta los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica, cuando cayó por 1-0 ante España.
Las eliminatorias parecen no sonreírle al ‘Chiqui’ Arce, quien en su primera era en el banquillo de Paraguay dirigió cinco encuentros, de los que ganó uno, empató otro y perdió tres. EFE