“La Federación Italiana de Fútbol anuncia que ha tomado nota de la renuncia de Roberto Mancini al cargo de entrenador de la selección italiana, recibida ayer a última hora de la tarde”, informó el organismo (FIGC).
Mancini, que no ha explicado los motivos de su renuncia, toma la decisión tras haberse mantenido en el cargo en un momento crítico de la historia del fútbol italiano, cuando no consiguió la clasificación para el Mundial de Qatar 2022 pese a ser la vigente campeona de Europa, en lo que fue el segundo mundial consecutivo sin la presencia de la ‘Azzurra’.
“Así concluye una página significativa en la historia de los ‘Azzurri’, que comenzó en mayo de 2018 y concluyó con las finales de la Liga de las Naciones de 2023, y en medio la victoria en la Eurocopa 2020, un triunfo conquistado por un grupo en el que todos los individuos supieron hacer equipo”, celebró el comunicado.
La inesperada decisión, tomada pocos días después de que la FIGC nombrara a Gianluigi Buffon como Jefe de Delegación de la selección, cargo que ocupaba su gran amigo Gianluca Vialli -fallecido por un cáncer de páncreas-, ha generado un terremoto en el seno de la Federación, que busca ahora el remplazo para el banquillo a menos de un año para la Euro2024.
Además, fue nombrado recientemente como el coordinador general de las selecciones sub'21 y sub'20, ganando más responsabilidad en el modelo de la selección y su reconstrucción.
Mancini lideraba la reconstrucción de Italia desde 2018 y, en los últimos encuentros, apostó por el talento joven como el de Wilfred Gnonto (Leeds) y por la nacionalización de varios jugadores como la de Mateo Retegui.
La Federación informó de que “anunciará el nombre del nuevo seleccionador nacional en los próximos días”, teniendo en cuenta “los próximos compromisos para las eliminatorias de la UEFA Euro 2024".
El técnico deja el banquillo ‘azzurro’ tras 61 partidos, con un bagaje total de 39 victorias, 13 empates y 9 derrotas. EFE