La imagen, publicada por la agencia “AFP”, recorrió el mundo y se instaló la controversia en toda Europa, pero principalmente en Alemania. El diario “Bild”, describió el afiche como “indignante”, mientras que “Die Welt” consideró el hecho como un “escándalo”.
En Italia, las críticas fueron más leves. El “Tuttosport” dice que hubo una exageración, y “La República” afirma que es una respuesta de los fans que no aprueban la labor de los portugueses.