El jugador argentino Sergio Agüero anunció este miércoles, a los 33 años de edad, su retiro del fútbol debido a la arritmia cardíaca que sufrió el pasado 30 de octubre en un partido con el Barcelona, su último club como jugador profesional.
Este tipo de problema de salud viene saltando más a menudo en los últimos tiempos.
El adiós de la leyenda blanca. El caso más conocido es el de Iker Casillas, quien el 4 de agosto del 2020 comunicó su decisión de colgar definitivamente los guantes tras más de un año sin pisar los terrenos de juego debido al infarto que sufrió el pasado 1 de mayo de 2019.
El arquero cerró una carrera repleta de éxitos a los 39 años de edad, siendo leyenda del Real Madrid y de la Selección Española y con un broche final con títulos en el Porto.
El adiós del Gigante de Guadalupe. El nombre de Lilian Thuram hace mucho ruido en los oídos de todos los paraguayos. Aquel defensor portentoso formó parte de la selección de Francia, que eliminó a Paraguay con el Gol de Oro en el Mundial 98.
En el 2008, el galo quería cerrar su carrera en el PSG, pero una detección de una malformación cardíaca durante el reconocimiento médico frustró su fichaje. Ya tenía 36 años de edad.
El adiós del Chino Martínez. El paraguayo defendía en el 2018 la camiseta del General Díaz cuando en un entrenamiento sintió dolores en el pecho. El defensor se sometió a análisis médico en el que no se detectaron problemas serios de salud.
El Chino indicó en ese momento que se realizó un cateterismo y paró sus prácticas por 30 días para volver a entrenar y jugar con normalidad. Sin embargo, el defensor colgó los botines poco después para dedicarse a la dirección técnica en las Águilas.
La lista se agranda con el nigeriano Nwankwo Kanu, quien protagonizó uno de los primeros casos mediáticos. Le siguen los de Rubén De la Red, Manuel Almunia y el impactante suceso de Fabrice Muamba, cuyo corazón estuvo parado 78 minutos antes de ser reanimado.
Las incógnitas de Eriksen. El centrocampista danés se desplomó durante la última Eurocopa en pleno partido entre Dinamarca y Finlandia en junio de este año. Eriksen sufrió un desvanecimiento en solitario cuando iba a controlar un balón.
La rápida asistencia médica en el propio césped permitió, tras un cuarto de hora en el sufrió un paro cardíaco, se logró estabilizarlo. Fue operado con éxito, pero aún no volvió a jugar. Según los reportes periodísticos rescindiría con el Inter de Milán ya que no puede jugar en la Serie A.