El año pasado, en segunda ronda, Pella dio una de las grandes sorpresas del torneo al ganar al croata Marin Cilic, que fue finalista en 2017.
En la edición de este año, el argentino reeditó su proeza y se impuso a Anderson, quien en 2018 perdió la final ante el serbio Novak Djokovic.
Además, Pella lo hizo en tres parciales, sin conceder ninguno ante el gigante de Sudafrica, que se perdió gran parte de la temporada por un problema en un codo y que no llegaba a Wimbledon en el mejor estado de forma posible.
En el primer encuentro del día en la pista central, Pella consiguió una rotura en la primera manga, dos en la segunda y cerró la victoria en el desempate del tercer parcial, tras un punto espectacular con un largo intercambio de voleas en la red.
Pella accede por primera vez en su carrera a octavos de final de Wimbledon, lo que supone, además, su mejor resultado en un Grand Slam.
Su siguiente rival será otro ‘cañonero’, el canadiense Milos Raonic, que pudo con el estadounidense Reilly Opelka, por 7-6 (1), 6-2 y 6-1.