La temida “bicicleta” que todo tenista intenta evitar se consumó en 48 minutos, tiempo que la campeona del torneo de Stuttgart y Roma invirtió para destrozar las defensas de la 78 del mundo y ser la primera en lograr ese resultado este año en París.
Candatu se enfrentaba por primera vez contra una de las jugadoras situadas entre las diez primeras y apenas pudo demostrar su valía ante la rusa, semifinalista en 2007 y 2011.
“Nada es nunca fácil, no importa si la rival juega bien o mal, siempre hay ganar el juego”, dijo Sharapova, que parece encontrarse en el mejor momento del año y que se enfrentará ahora con la japonesa Ayumi Morita.
“Estoy muy contenta con mi preparación hasta aquí y mi impresión es que mi juego ha progresado con los años y también la forma en la que ahora construyo los puntos y se como jugar en esta superficie”, añadió la rusa a la que solo le falta Roland Garros para completar los cuatro grandes en su carrera.
“Físicamente me siento capaz de ganar siete partidos difíciles, y eso también me ayuda mentalmente. En el pasado he tenido partidos complicados al comienzo de este torneo y eso me costó caro después, pero también he mejorado esa circunstancia”, añadió. EFE.