12 dic. 2024

Ferrer, líder del equipo español, abre contra Querrey, número dos americano

Gijón (España), 13 sep (EFE).- David Ferrer, número uno, y Sam Querrey, dos, abrirán mañana, a partir de las 12:00, la semifinal del Grupo Mundial entre España y Estados Unidos, que se disputa este fin de semana en el Parque Hermanos Castro de Gijón, donde el conjunto español, defensor del título, quiere ampliar su racha de 23 victorias consecutivas en casa.

Ferrer será así el encargado de enfilar para España el objetivo del conjunto que capitanea Alex Correjta, y con su experiencia dejar el camino más llano para Nicolás Almagro, que luego se medirá con el número uno John Isner.

Ferrer y Querrey se han enfrentado dos veces en sus carreras, pero siempre en superficie dura. La primera en Auckland en 2009 se saldó con victoria del americano, y la segunda, hace dos temporadas en Cincinnati, con triunfo de David.

La clave de la eliminatoria puede estar precisamente en la recuperación de David Ferrer, que llegó el lunes a Gijón tras caer en las semifinales del Abierto de EE.UU. y que se apuntó inmediatamente a los entrenamientos para realizar el tránsito de pista dura a tierra batida lo más rápido posible, mientras se acostumbraba al cambio de horario.

El de Xavea es un especialista en salvar este tipo de circunstancias, y en la mejor temporada de su carrera, asentado entre los cinco primeros del mundo, con cinco títulos en su haber, Acapulco, Buenos Aires, Auckland, Hertogenbosh y Bastad, logrados en tres clases de pista diferentes, tierra, hierba y dura, tiene la responsabilidad de ocupar el puesto de Rafael Nadal y tirar del equipo.

El segundo partido de la jornada del viernes entre Almagro e Isner, solo tiene un precedente y el murciano guarda buenos recuerdos, pues lo remató con triunfo histórico en Wimbledon el año pasado.

Para Ferrer es su concurso 16 en la Davis, el primero esta temporada, con un balance de 19 triunfos y solo cuatro derrotas, y 14-0 sobre tierra. En Oropesa ganó sus dos encuentros contra los austríacos Jurgen Melzer y Haider Mauer sin ceder un set. Ante los estadounidenses quizás le cueste algo más, pero es sin duda el más regular de los españoles.

Para Nicolás Almagro también es un desafío. Se encuentra en el puesto décimo del mundo, después de haber triunfado en Sao Paulo y Niza, además de llegar a las finales de Bastad y Buenos Aires, y su hombro derecho, que tantos problemas le dio durante los JJ.OO. de Londres, parece ya repuesto.

Con un balance de siete victorias y solo dos derrotas en sus partidos individuales, “Nico”, afronta su sexta eliminatoria con el equipo nacional y la tercera este año. En las dos anteriores, en Gijón contra Kazajistán, y en Oropesa contra Austria, no perdió uno solo de los cuatro partidos que disputó.

Mientras, el conjunto de Jim Courier, aunque da como favorito al español, guarda sus opciones recordando que este año se ha plantado en las semifinales ganando a domicilio a Suiza y a Francia, y a los dos conjuntos sobre tierra batida.

John Isner ocupa ahora el puesto de Roddick, y ha sido el gran artífice de esas hazañas al hacerse con sus dos partidos individuales en ambas eliminatorias. En Friburgo, liquidando a Roger Federer en cuatro sets, y luego a Chiudinelli, y en el Montecarlo Country Club al vencer a Jo-Wilfried Tsonga y cerrar la contienda derrotando a Gilles Simon.

En Copa Davis tiene una marca de 7-3, y ha jugado sus cinco eliminatorias sobre tierra. Con dos títulos ATP este año, Winston-Salem y Newport, y otras dos finales, Houston e Indian Wells, el gigantón (2,06 metros) de Greensboro, es como dice su entrenador, Craig Boynton, “el vecino de al lado que quisieras tener”.

Tranquilo y simpático, Isner se muestra contumaz y con una gran sangre fría sobre la pista, como demostró en la final de Winston-Salem este año, tras salvar tres bolas de partido ante el checo Tomas Berdych y ganar por segundo año consecutivo el título.

Sam Querrey vuelve al equipo tras las bajas de Andy Roddick y Mardy Fish. Su última comparecencia fue en 2010 contra Colombia. El año pasado estuvo apartado del circuito por un problema en el codo y su ránking cayó por debajo de los cien primeros, pero ha trabajado duro para intentar alcanzar la forma con la que logró en enero del 2011 ser el 17 del mundo.

Con casi 26 años es el más joven del equipo y esta temporada ha ganado el torneo de Los Angeles y el challenger de Sarasota. Situado en el puesto 26 del mundo, es el rival a batir tanto por Ferrer como por Almagro.

En el punto de dobles, el guión también se ciñó a lo previsto. Marcel Granollers y Marc López, éste último recuperado ya de su pequeño desgarro muscular, se enfrentarán el sábado, a partir de las 14:00 horas, a los hermanos Mike y Bob Bryan, los número uno del mundo en esta especialidad que llegan a Gijón, tras ganar por cuarta vez el Abierto de EE.UU. su duodécimo título del Grand Slam, récord en dobles masculinos de esta categoría desde que comenzó la Era Open, y el 83 de su carrera.

Aunque en principio, este es el punto de más claro color americano, Granollers y López recuerdan que en la final de Toronto esta misma temporada, tuvieron bola de partido ante los Bryan, aunque sucumbieron por 1-6, 6-4 y 10-12.

El poderoso dúo americano permanece invicto en tierra y su balance en Copa Davis es de 19-2. En la eliminatoria contra Suiza, Mike tuvo que jugar con Mardy Fish, porque Bob se quedó en casa por el nacimiento de su hija Mikaela, y los americanos ganaron a Federer y Wawrinka. Luego los dos Bryan se unieron de nuevo contra Francia para derrotar a Julien Benneteau y Michael Llodra en cuartos.

Han ganado esta temporada cinco títulos. Además del logrado en Flushing Meadows cuentan con la medalla de oro en los JJ,OO, de Londres, los Masters 1.000 de Montecarlo y Toronto, y los torneos de Sydney y Niza. Fenomenal temporada con las finales del Abierto de Australia y Roland Garros, y las semifinales de Wimbledon, Cincinnati y Miami como añadido. Un sensacional resumen de 55 victorias y solo nueve derrotas.

A Granollers y López tampoco se les ha dado mal el año. Han vencido en 38 encuentros y han perdido 18. Dos títulos, Gstaad y Roma es lo mejor que han hecho, pero han sido muy regulares, con las finales de Toronto, Umag, Barcelona y Acapulco, además de las semifinales del Abierto de EE.UU.

Debutaron contra Kazajistán ganando sin ceder un set, aunque luego cayeron contra la pareja austríaca en Oropesa. Quizás sus fiascos más dolorosos fueron la derrota en la primera ronda de los JJ.OO. y las del Abierto de Australia y Roland Garros.

Los dos equipos tendrán un ojo puesto en lo que suceda en la otra semifinal que se disputa en el Mary Terán de Weiss en el Parque Roca de Buenos Aires, donde Argentina lucha contra la República Checa.

La final se disputará del 16 al 18 de noviembre y caso de ganar este fin de semana España y Argentina, el conjunto de Alex Corretja viajaría a Buenos Aires. Si vence la República Checa, también tocaría disputar la final como visitante.

Miguel Luengo