La selección escocesa de rugby se aferró a sus opciones de clasificación para los cuartos de final del Mundial de Francia, tras imponerse este domingo por 45-17 a una Tonga que nada pudo hacer ante la voracidad ofensiva del conjunto europeo que cerró el choque con siete ensayos.
Tras caer ante Sudáfrica, la vigente campeona del mundo, en la primera jornada los jugadores del “XV” del Cardo eran conscientes de que si querían acceder a la siguiente ronda del torneo no sólo debían ganar todos sus encuentros, empezando por el de este domingo en Niza, sino hacerlo por la mayor diferencia posible de puntos.
Urgencias ofensivas que azuzaron la voracidad ofensiva del conjunto escocés, nú mero cinco de la clasificación mundial, que a los seis minutos de juego ya vencía por 7-0 gracias a un ensayo de George Turner.
Pero si Escocia, semifinalista en el Mundial disputado en el año 1991, no quería hipotecarse a las primeras de cambio su futuro en el torneo, mucho menos la rocosa Tonga, que logró dar la vuelta al tanteador (7-10) con un golpe de castigo de William Havili y un ensayo de Solomone Kata.
Un resultado que pareció activar definitivamente a Finn Russell, el hombre sobre el que pivota todo el ataque del equipo escocés, que volvió a demostrar su maestría para leer el juego con dos acciones que propiciaron los ensayos de Duhan van der Merwe, que estableció el 12-10 en el minuto 26, y Kyle Steyn, que cuatro minutos después firmó el 17-10.
Renta que los europeos lograron doblar (24-10) al llegar el descanso, gracias a un postrero ensayo de Rory Darge, que no desaprovechó la superioridad numérica de la que gozó Escocia en el tramo final de la primera parte tras la tarjeta amarilla con la que fue sancionado el tongano Afusipa Taumoepeau por una peligrosa acción sobre Jamie Ritchie.
Ni así se rindió, sin embargo, el conjunto polinesio, que volvió a soñar con la posibilidad de sorprender al “XV” del Cardo, tras situarse a tan sólo siete puntos en el marcador gracias a un ensayo a los cuatro minutos de la segunda mitad de Ben Tameifuna, que hizo valer sus 150 kilos.
Pero ni Finn Russell, ni mucho menos el ala Duhan van der Merwe, otro de los destacados del encuentro, estaban dispuestos a que nada, ni nadie apartase a Escocia de la victoria.
Tal y como quedó claro diez minutos después, en el 54, en una acción de Van der Merwe que George Home acabó convirtiendo en el quinto ensayo del equipo escocés, que volvió a distanciarse en el marcador (31-17).
No fue el último ensayo de los de Gregor Townsend que sumaron dos nuevas marcas por medio de Blair Kinghorn y de Darcy Graham, que estableció en el tiempo de prolongación el definitivo 45-17 que permitió a Escocia seguir vivo en la lucha por acceder a los cuartos de final.EFE