Desde la eliminación franjeada de la Copa Libertadores a manos del Botafogo, el Olimpia comenzó a vivir una fuerte presión, en la busca de resultados que hagan desempolvarse y pelear el torneo Apertura 2017.
Pablo Repetto, responsable de la eliminación copera, duró apenas dos partidos en certamen local. Venció 3-0 a Sportivo Trinidense en la primera fecha y fue cesado del cargo tras el empate 1-1 con Independiente en la siguiente jornada.
Mauro Caballero tomó las riendas desde la salida del charrúa y estuvo 13 partidos al frente del equipo en el que apenas ganó 5 juegos y empató otros 5, haciendo 20 de 39 puntos posibles. Un registro de 51% de efectividad, muy por debajo de lo admitido en un equipo grande como Olimpia.
Pese a todo, el Franjeado se mantiene en la parte alta de tabla a apenas 4 unidades de la cima. El próximo entrenador tendrá levantar el rendimiento del equipo, muy cuestionado en varios partidos.
El nuevo DT debe ser alguien que encuentre un funcionamiento, un juego colectivo y principalmente deje de depender de los chispazos de sus figuras para despejar el clima de tensión que se instaló desde febrero pasado.
