El Newcastle United está cerca de cerrar su venta a un fondo de Arabia Saudí después de que este haya solucionado los problemas de derechos audiovisuales que echaron para atrás la operación hace año y medio.
Public Investment Fund (PIF, por sus siglas) es el fondo que proveerá gran parte de los 300 millones en los que está valorada la operación y guarda una estrecha relación con Arabia Saudí, lo que no impide que pueda hacerse con un club de la Premier League.
La Premier, sin embargo, no dio luz verde a la operación en abril del año pasado por los problemas de piratería en el país saudí con el operador BeIn Sports, uno de los canales que poseen los derechos de la competición.
Resuelto este problema, Mike Ashley, dueño del Newcastle, tiene vía libre para vender el club después de catorce años al mando.
Pese a que hubo muchas críticas a la operación, debido a que Arabia Saudí ha sido acusado de cometer crímenes contra los derechos humanos, como con el periodista Jamal Khashoggi, descuartizado en el consulado saudí en Estambul, PIF está considerado como un ente independiente del estado, por lo que la Premier no puede echar para atrás la operación.
Además, un 93 % de los aficionados del Newcastle se han posicionado a favor de la venta, según una encuesta, ya que ven esta operación como una posibilidad de convertirse en un nuevo Manchester City, viendo que la situación del equipo en estos momentos es preocupante. Son penúltimos con tres puntos en siete jornadas.