En el grupo A, Argentina cayó con Corea del Sur por 2-0. El primer tanto puso de relieve porque a Lee Seung-woo se le conoce como el “Messi coreano": el 10 asiático encontró un balón suelto en el centro del campo y, con metros por delante, puso el turbo, quebró a Senesi y salvó la salida de Petrolli con un leve toque con la zurda.
Este gol maradoniano abrió el camino para el triunfo que se fue cimentando con el tanto de penal de Paik Seung-ho.
Pese al 2-0, Argentina salió en la reanudación más enérgica y encontró premio cuando Torres controló un envío en profundidad y batió por bajo a Song para el 2-1.
Con esta segunda victoria, los surcoreanos, que juegan en casa, certificaron también su paso a octavos y decidirán el primer puesto del grupo ante el Inglaterra el viernes. Argentina deberá ganar a Guinea y esperar un milagro. EFE
