Un gol de cabeza del marfileño Didier Drogbá en la primera parte y dos del marfileño Salomón Kalou y del inglés Daniel Sturridge al filo del minuto noventa dieron la victoria a los visitantes ante un conjunto que todavía no había perdido en casa esta temporada.
El resultado otorga una dosis de moral a los “blues” al comienzo de una semana clave para ellos, en la que se enfrentarán al Valencia y al líder de la Premier, el Manchester City, después de haber cosechado varias derrotas en el último mes.
El juego afilado de Strurridge y Drogba en el ataque, así como la omnipresencia del exvalencianista Juan Mata en el eje del centro del campo, aseguraron esta tarde una victoria que devuelve al Chelsea a los puestos de Champions de la liga inglesa.
El resultado da aire al técnico André Villas-Boas, cuya continuidad en el club propiedad del magnate ruso Roman Abramovich comenzaba a ser puesta en duda.
Para tratar de revertir la dinámica del equipo en las últimas semanas, el luso echó mano de lo que consideró mejor de su artillería, un plan que no incluía al español Fernando Torres, en el banquillo de inicio, ni al francés Nicolás Anelka, en la grada.
Tras la ovación de un minuto que los aficionados dedicaron antes del encuentro al ex ugador del Newcastle y seleccionador galés Gary Speed, que fue hallado muerto en su casa el pasado fin de semana, con 42 años, el Chelsea desplegó en el recién bautizado Sports Direct Arena un juego basado en la presión en el centro del campo y las respuestas rápidas y verticales.
Los visitantes no tardaron más de 13 minutos en disponer de la primera ocasión clara del encuentro: un penalti fallado por Fank Lampard.
El guardameta holandés Tim Krul sacó una mano para desviar al palo el disparo raso del inglés, encargado de ejecutar la pena máxima con la que el colegiado castigó una caída en el área de Sturridge.
Los “blues” rompían la defensa rival con cierta facilidad y disponían de las mejores ocasiones, mientras que el Newcastle acusaba la presión en la línea de medios y se veía obligado a colgar balones al área visitante, una estrategia que no arrojaba demasiados frutos para los de Alan Pardew.
Fue en el minuto 37 cuando el Chelsea logró plasmar en el marcador su dominio sobre el césped por medio de un cabezazo de Drogbá a la escuadra izquierda de Krul.
Juan Mata, que en pocos meses se ha erigido como el cerebro de los “blues”, recogió un saque de banda en campo contrario para poner el balón en un lugar deshabitado del área del Newcastle y habilitar al marfileño para rematar a placer el 0-1.
Pocos minutos antes, los locales habían disfrutado de su mejor oportunidad en el encuentro, un remate del francés Demba Ba que se estrelló en el palo de la meta de Petr Cech.
Los de Villas-Boas dominaron el encuentro con comodidad, aunque su defensa demostraba algunas carencias ante un Newcastle que creaba peligro en las pocas ocasiones que lograba acercarse al área de los “blues”.
Con el tiempo casi cumplido, un Torres recién salido del banquillo creó una ocasión de peligro en el área que terminó rematando a la red el marfileño Salomon Kalou, que sumó el segundo de la tarde a un marcador que terminó redondeando Sturrdige cuando el Newcastle estaba ya rendido.