“Me han sorprendido algunas imputaciones de la ministra de Deportes de Chile, que intentaron manchar una gestión transparente y exitosa. Considero que pueden haber sido provocadas por el desconocimiento de la institución a la cual se incorporó poco antes de la difícil decisión del cambio de sede”, expresa Domínguez.
“Conmebol nunca solicitó “la financiación de una fiesta de 40 millones (de dólares) en castillo Hidalgo”, como afirmó la ministra. A ella no se le pidió y a nadie antes de ella. Toda fiesta o costo que esté vinculado a las finales es pagado íntegramente por la Conmebol”, apunta la carta del timonel de la Conmebol.
“En cuanto a lo de la ley corta para pagar menos impuestos”, prefiero dejar que lo explique la ministra. Por mi parte puedo afirmar que desde que presido la Conmebol, a partir de 2016 he luchado para devolver al fútbol, a los jugadores, a los clubes, y a todo el público que lo sigue, el dinero generado por el fútbol (...) Según cifras publicadas por el gobierno (peruano), la realización de la Final Única en Lima significó un impacto de más de USD 62 millones”, apuntó.