El club presidido por Enrique Cerezo respondió mediante un comunicado oficial a las declaraciones de Bartomeu, que afirmó que el jueves mantuvieron una reunión Óscar Grau y Miguel Ángel Gil para contemplar la posibilidad de negociar por el delantero francés. “El primer contacto por Griezzman fue ayer”, dijo el máximo mandatario azulgrana.
Ante esas afirmaciones, el Atlético de Madrid asegura que el pasado 14 de mayo Griezmann comunicó a Miguel Ángel Gil, Diego Simeone y Andrea Berta su decisión de abandonar el club a final de temporada.
En los días posteriores, explica el citado comunicado, el cuadro rojiblanco “tuvo conocimiento” de que el Barcelona y su jugador habían alcanzado un acuerdo en el mes de marzo en los días posteriores al choque de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones que disputó ante el Juventus. Además, informa de que ambas partes habían estado negociando las condiciones del acuerdo desde mediados de febrero.
El Atlético de Madrid reconoce la reunión que mantuvieron este jueves Miguel Ángel Gil y Óscar Grao a petición del Barcelona. En ella, afirman, Grau manifestó su intención de una vez modificada la cláusula de rescisión del contrato de Griezmann, que pasó de 200 a 120 millones de euros, pedir un aplazamiento del pago del referido importe de la cláusula vigente a partir del 1 de julio.
“Evidentemente la respuesta del Atlético de Madrid fue negativa, entendiendo tanto que el Fútbol Club Barcelona como el jugador han faltado al respeto al Atlético de Madrid y a todos sus aficionados”, manifiesta el club rojiblanco.
“Como consecuencia de todo ello, en el día de hoy, el Atlético de Madrid ha requerido al jugador, a su hermana como agente del futbolista y a su abogado, que Antoine Griezmann, en cumplimiento de sus obligaciones contractuales con nuestro club, comparezca el próximo domingo en las instalaciones de la entidad con el fin de empezar la pretemporada con el resto de sus compañeros”, agrega.
El comunicado culmina con una enérgica “repulsa” por el comportamiento de Griezmann y del Barcelona por haber “inducido” al jugador a romper su vínculo contractual con el Atlético de Madrid en un momento de la temporada en la que el club rojiblanco se estaba jugando la Liga de Campeones y el título de Liga.
“Eso es algo que consideramos vulnera los periodos protegidos de negociación con jugadores y altera las normas básicas que rigen la integridad de toda competición deportiva, además de suponer un enorme perjuicio para nuestro club y sus millones de aficionados”, culmina.