“El proyecto cumple los requisitos para prevenir la propagación del coronavirus después de una revisión detallada por parte de los expertos”, afirma el ministro de Sanidad, Rudolf Anschober, en un comunicado.
El visto bueno de las autoridades dependía de una propuesta detallada por parte de los organizadores sobre cómo se iba a celebrar la competición minimizando las posibilidades de contagio.
Entre esas medidas se prevén “estrictas medidas de higiene, pruebas periódicas y controles de salud para los equipos y todos los demás empleados” que participen en la organización de la competición.
“Las dos carreras de Fórmula Uno los días 5 y 12 de julio de 2020 en Spielberg, Estiria, se llevarán a cabo sin espectadores”, señala el comunicado de Sanidad, que destaca que los organizadores han presentado un “proyecto completo y profesional para prevenir infecciones y contagios”.
Ross Brawn, máximo responsable deportivo del Mundial de Fórmula Uno, ya había expresado a principios de mes que Austria era el lugar ideal para comenzar el campeonato.
“Es bastante difícil encontrar el tipo correcto de carrera en el que, desde el principio, podamos controlar el entorno lo suficientemente bien como para garantizar la seguridad de todos”, explicó Brawn.
“Austria se ajusta muy bien a eso. Tiene un aeropuerto justo al lado del circuito, al que las personas pueden llegar. No está demasiado cerca tampoco de una ciudad”, precisó.
El campeonato de Fórmula Uno, que debería haber comenzado en Australia en marzo, ha perdido ya las primeras diez pruebas de la temporada con la cancelación del Gran Premio de Francia, programado para el 28 de junio.
Los organizadores del campeonato confían en poder celebrar todavía 15 carreras este año.