“Se inhabilita temporalmente el estadio Monumental (Banco del Pichincha), estadio de Barcelona, para encuentros deportivos del cualquier índole, ya sea con público o sin este, hasta segunda orden”, dice la resolución que leyó este lunes Carlos Salvador, director médico del Municipio y que, indicó, está firmada por la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri.
El cierre del estadio, horas antes del partido entre ambos equipos, se registra a raíz de que “un grupo de jugadores del Flamengo es positivo de COVID”, según escribió la alcaldesa por redes sociales antes de enviar a un equipo médico a revisar la situación en el hotel del congregado brasilero.
Según el informe municipal, “son siete los casos de jugadores de Flamengo que han dado positivo”.
“Estamos ante un caso de alto riesgo, debido a que estos jugadores han tenido contacto estrecho, sin el uso de los trajes de protección”, resaltó Salvador mediante una rueda de prensa tras la inspección hecha del hotel.
Por el momento, la Conmebol no ha confirmado oficialmente la suspensión del partido, aunque el cierre del estadio y las decisiones del Departamento de Salud del Municipio hacen técnicamente imposible su celebración.
“Cerrado para cualquier tipo de evento el estadio en forma temporalmente, al menos en el estadio de Barcelona no habrá partido hoy”, aseguró la alcaldesa.
En el Barcelona las pruebas exigidas hasta el momento no han dado casos positivos y la seguridad de su estadio Monumental, aseguran, ha cumplido con todas las normativas tanto en el torneo local como también en el de Libertadores.
En ese mismo estadio se disputó el jueves pasado el partido por la tercera fecha entre Barcelona y Junior de Colombia.
El enfrentamiento entre Barcelona y Flamengo corresponde a la cuarta jornada del Grupo A, que lidera Independiente del Valle con 9 puntos, seguido de Flamengo con 6 y Junior de Colombia, con 3, mientras que Barcelona es último sin ningún punto.
La Copa Libertadores fue suspendida en marzo pasado ante la expansión de la pandemia por el coronavirus en el continente y se reanudó desde el 15 de septiembre mientras persiste la crisis sanitaria.
Por lo que los encuentros se están disputando sin la presencia de aficionados en los estadios y en medio de estrictos protocolos de bioseguridad.