El histórico defensor central Paulo Da Silva, el delantero Santiago Salcedo y el extremo Antonio Bareiro son los primeros adelantados de la delegación guaraní que jugará en Santiago de Chile un partido de vida o muerte contra el combinado transandino.
Los jugadores de Olimpia (Richard Ortiz, Cristian Riveros y Néstor Camacho) y de Cerro Porteño (Antony Silva, Rodrigo Rojas y Víctor Cáceres), que participarán mañana en el superclásico del fútbol paraguayo, viajarán inmediatamente tras el compromiso que se salvará en Sajonia.
La Albirroja enfrentará el encuentro contra la Roja con dos restas muy importantes. La primera deserción es la de Federico Santander, baja por una fractura en la tibia, en tanto que Fabián Balbuena estará ausente por problemas musculares, aunque éste último se incorporará a la delegación nacional.
El 31 de agosto la Albirroja visita a Chile en Santiago. El 5 de septiembre, Uruguay llegará al Defensores del Chaco. Paraguay se juega una de sus última cartas de cara al Mundial de Rusia 2018. Está octava en la clasificación con 18 unidades.
Estos dos compromisos, de los que solo sirve ganar, servirán para saber si Paraguay mantendrá las opciones matemáticas de alcanzar una de las cuatro plazas directas que permanecen en juego tras la clasificación anticipada de Brasil, o tiene la posibilidad de pelear por el quinto puesto, con lo que obtendría el derecho a jugar una repesca.
En la primera ronda de las eliminatorias, la Albirroja ganó a Chile por 2-1 en Asunción en septiembre pasado. Pero en su visita a Montevideo cayó por 4-0 ante Uruguay.
Paraguay volverá a volcar sus esperanzas en las botas de su mayor figura, Óscar Romero del Alavés español, y la calidad del centrocampista Miguel Almirón, que destaca en la MLS.